PREBIOTICOS
Los prebióticos son el alimento de los probióticos y, por tanto, fundamentales para un buen estado del microbioma y la flora intestinal. De ahí que últimamente muchas empresas los comercialicen, la mayoría ofreciendo los que han sido más estudiados: los frutooligosacáridos (FOS), los galactooligosacáridos (GOS) y los oligosacáridos de la leche materna humana (HMO). Todos ellos tienen propiedades terapéuticas tanto por sus efectos directos sobre el epitelio intestinal como por su función potenciadora del crecimiento de las colonias bacterianas beneficiosas y de ahi que una dieta rica en ellos sea excelente tanto para mantener una buena salud como para tratar patologías concretas.
Los prebióticos son el alimento de los probióticos y, por tanto, fundamentales para un buen estado del microbioma y la flora intestinal.
Cada vez más investigadores y médicos consideran que el desequilibrio del microbioma es el origen de la mayoría de las enfermedades; desde el asma hasta el cáncer pasando por la obesidad, la colitis ulcerosa, la diverticulitis o el alzheimer.
Los prebióticos más estudiados son los frutooligosacaridos (FOS), los galactooligosacáridos (GOS) y los oligosacáridos de la leche materna humana (HMO). Y todos ellos son excelentes tanto para mantener una buena salud como para tratar patologías concretas.
La ingesta de prebióticos promueve el desarrollo de bifidobaterias que ayudan en la digestión y se ocupan de eliminar microorganismos patógenos.
La leche materna humana contiene unos 200 tipos distintos de oligosacáridos y la leche animal apenas 10 siendo la variedad de sus estructuras moleculares, que son las que definen la acción terapéutica específica, realmente asombrosa.
Los prebióticos son especialmente útiles en casos de diarrea, enfermedades inflamatorias intestinales (Ell), síndrome metabólico, obesidad, diabetes, osteoporosis, hipertensión, eczemas y cáncer.
Las enfermedades inflamatorias intestinales pueden tratarse con una alimentación sana rica en alimentos antiinflamatorios reforzada con prebióticos y probióticos; la alternativa es tomar de por vida corticoides inmunodepresores o una rección quirúrgica. Y ninguna de las dos parece aconsejable.
Los prebióticos favorecen la presencia y dominio de las bacterias intestinales benéficas. Y su consumo conjunto con probióticos, en especial con bifidobacterias, es el mejor método para afrontar numerosas patologías-
Lo mejor es comer a diario suficientes alimentos vivos, frutas y ensaladas, a fin de obtener al menos 15 gramos diarios de prebióticos; lo que equivale aproximadamente a unos 30 gramas de fibra.